JUEVES SANTO

Jueves Santo
noche de pasion
y de dolor,
hoy
te llevan
mi buen Señor,
mi salvador
y redentor,
ante la cruz
aquellos
que no creyeron
en ti, aquellos
que se mofaron
de ti.
Hoy
Señor,
los soldados
romanos
de la agrupacion
de soldados romanos
de la cofradia
california,
te rinden honores
pidiendote
perdon
ante el Ècce Homo,
por conducirte
ante la cruz.
Toda
España
calla
y se oscurece
apagandose
todas las luces
como señal
y sigo de su dolor,
tan solo se oye
un único tambor
con sordina,
que va marcando
el ritmo acompasado
de toda una procesion.
La música
en este dìa
es la sintonìa
compuesta
por el tintineo
de las lagrimas,
que colgadas
van en los hachotes,
y tronos,
junto con el roce
de las capas
y pasos
de los capirotes
y porta pasos.
El corazon
y las almas
de todos
los cristianos
se entristecieron
y lloraron,
al verte llevar
ante la cryz,
mi buen Señor,
mi hermano,
ya tan solo
queda un día
menos de pasion,
de dolor
y de sufrimiento
y de pesar.
Ya falta un dìa
menos
para resucitar
y volverse
alegrar
nuestra alma.
Te quiero
mi buen Señor,
por dentro
estoy llorando
y tratando
de no sollozar.
Los diferentes
tercios
de las diferentes
agrupaciones
visten de colores
en tonos
grises,
negros,
dalmata verde
y blancos.
El primer
tercio
y trono
en salir
es el del "Òsculo"
con sus túnicas
grises,
capas y capuces
color negras oscuras.
Siguiendoles
van el tercio
y el trono
del "Cristo de los mineros",
con sus túnicas
y capas
de color
gris
plomo
y el mocho
negro.
El tercero
que les sigue
el paso,
es el tercio
y el trono
"El Ècce Homo",
con sus túnicas
de color
rojo
y sus capuces
de color
negro,
como el carbon.
El siguiente
paso
es el tercio
y el trono
de la "Santísima
Virgen de la Esperanza",
con túnicas
y capuces
de color
blanco
y sus capas
de color
dalmata verde.
Y el último tercio
y trono
en seguirle
es el de la" vuelta
al Calvario"
con sus tunicas
y capuces
blancos
y sus capas
negras.
Termina la procesion,
las personas
se recogen
o se quedan
a cenar,
para ver la siguiente
procesion
que sale a las tres
de la madrugada
para recogerse
a las cinco
de la mañana,
que es lo que dura
la del encuentro.