Una narración para Cristina y Borja
UNA NARRACIÓN PARA CRISITINA
CRISTINA, BORJA Y SU PAJARILLO
Había una vez una niña, a la que su tita le llamaba, flor de pitiminí, de pelo rubio, rubio como el oro, dos ojos como dos luceros, de brillantes que son, mejillas sonrosadas como dos melocotones de terciopelo de color rosa, esa niña se llama Cristina. Cristi, que es como también le llama su tita, tiene un pajarito de color gris claro, con motitas blancas con una mancha de color rojo a cada lado del pico, y el pico también es vecilla, que era perla moteada del Brasil, ese es el nombre científico, no entendía sus palabras. Un día de tantos, su amita abrió la puerta de la jaula , pensando en que él acudiría otra vez a su hogar, para que disfrutara del bello y hermoso día que hacia. Dar tañan emprendió el vuelo, volando y volando, se fue alejando de la casa, para hacer ejercicio con sus bonitas alas, de donde le cuidaban y mimaban. Pasaron los días, unos tras otros, y Dar Tañan no volvía, su amita no tenia ganas de salir a la calle, ni quería salir ha pasear con sus papas y su amiguito Borja, así como lo hacía, como lo hacía siempre, ya que sabia que la avecilla estaría esperándola en su hermosa y bonita jaula; pero ahora sería diferente y no podría contarle nada, ella tan sólo quería llorar, y suponía que el ya no volvería más a su hogar - no se, no se.....-Poco a poco Cristi se iba poniendo enferma, estaba sin apetito, ni tampoco tenía ganas de jugar con su mejor amigo Borja; había perdido todas las ilusiones y las esperanzas y no quería hablar con nadie. Sus padres, abuelos, tíos y amigos, le compraron juguetes, un pajarito igual a Dar Tañan, dulces y golosinas, ella se los daba a Borja, ya que Cristi lo único que ansiaba era que estuviese su pajarillo con ella. Un día viendo su madre que ella no mejoraba, que seguía con inapetencia y deprimida, llamó al médico, para que le recetara algo a Cristi, y para que se pusiera buena. El doctor le prescribió ricos jarabes, para que ella se aliviara, pero Cris no quería tomarlos, observando el médico que la niña seguía igual, le comentó a los padres, que lo que tenía que ocurrir era un milagro, porque lo que le pasaba a ella era que estaba apenada, dicho prodigio era que volviese la perlita moteada del Brasil. Sus padres, abuelos, titos, y amigos , le comentaban a la pequeña, para que se animara, que cuando se enterase Dar Tañan de que ella estaba triste y malita, el volvería a emprender el vuelo y volvería de nuevo junto a ella, y ya se quedaría para siempre a su lado y nunca jamas se volvería ha marchar. Un domingo la chiquilla, estaba asomada a la ventana recordando lo feliz que era con su avecilla, cual fue su sorpresa....al ver que una avecilla idéntica a Dar Tañan estaba volando cerca de su casa, presintió que era su querida avecilla cantora, pero no fue sólo un prodigio sino que fueron dos en uno, porque Dar Tañan venía acompañado de Julieta, cuando Cristi los vio que cada vea se acercaban mas a la ventana, el corazón le iba latiendo a cien por hora de la emoción, fue corriendo hacia sus padres y abuelos que estaban en la sala de estar,a decirles que Dar Tañan había vuelto pero no sólo sino que con otro pajarito, mejor dicho pajarita, y que ya sabía que nombre le iba a poner, como el de la novia de Dar Tañan y los tres mosqueteros, Julieta; desde entonces Cristi ya esta buena y le ha vuelto hacer caso a sus padres, a vuelto ha jugar con todos sus amiguitos e incluso con su mejor amigo Borja. Cuando Cristi tenía 4 años su mama dio a luz un bebe muy bonito, al que le puso el nombre de su abuelo Jaime ademas de segundo le puso David. Cuando el tenía tres años, y le preguntabas que como se llamaba, el respondía Jaime Mulero Molinet y David, porque pensaba que David era otro apellido. Cuando Cristi hizo la comunión sus padres le regalaron un janster, que le pusieron de nombre Watuqui, ahora Cris ya no tiene sólo un compañero , sino que tiene tres compañeros de juegos, bueno si sumamos a Dar Tañan y a Julieta ya son cuatro amigos para jugar en casa.- Resulta que el Watuqui no era macho, pues la madre de una amiga de Cris, se dio cuenta que era hembra. En el verano en Islas Menores encontraron a un verdeirol que tenía una ala rota, y se quedaron con el y así es como iban aumentando los amigos de Cristina, y la niña iba siendo cada vez mas feliz. Han pasado ya veintisiete años, y los dos hermanos ya se han hecho mayores, tienen una carrera y un trabajo cada uno. Ella se ha colocado en Liverpool y Jaime esta terminando la carrera, ademas de trabajar en lo que a el le gusta, en la informática.
Caxú(c)
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